Por hechos que datan del 1 de febrero de este año, en que una mujer de 27 años protagonizó una golpiza en contra de su padre, ayer fue formalizada por el delito de parricidio frustrado. El Ministerio Público relató que el móvil que habría motivado la agresión sería de índole económico, mientras que las lesiones propinadas dejaron a la víctima en riesgo vital. Este lunes fue detenida por la PDI y puesta a disposición de los tribunales, desde donde este martes fue enviada a prisión.
La mujer protagonizó la violenta escena bajando de un vehículo armada de un bate de béisbol tras encontrar a su padre en calle Jorge Montt, a la altura del Nº 0281, al que golpeó en la cabeza en reiteradas ocasiones.
La agresora, cuya identidad fue pedida mantener en reserva por el tribunal, fue retenida por otras tres personas, quienes impidieron que continuara con la golpiza. Posteriormente trasladaron a la víctima hasta el Hospital Clínico de Magallanes, donde diagnosticaron sus lesiones como un traumatismo encefalocraneano, con un pronóstico médico legal grave: al momento de ingresar al recinto hospitalario se encontraba en riesgo vital producto de las lesiones.
El subprefecto Jair Bravo, jefe de la Brigada de Homicidios de Punta Arenas, sostuvo que se lograron recabar antecedentes suficientes, como declaraciones de testigos y empadronamiento de cámaras, para acreditar la participación de la mujer en los hechos. “Se logró establecer la dinámica de cómo ocurrieron los hechos y en razón a esto el fiscal solicitó la orden de detención, la cual fue materializada el día lunes”.
El fiscal Fernando Dobson, quien lleva la causa, reforzó durante la audiencia que fue la propia víctima quien identificó a su agresora, indicando que se trata de su propia hija, aportando además la dinámica de los hechos. Igualmente la médico de turno agrega haber conversado con la hija en el hospital, ya que ella se acercó para conocer el estado de salud de su padre, reconociendo su autoría en los hechos. Por último, el fiscal Dobson sostuvo que el móvil de la agresión sería de índole económico.
Entre los antecedentes aportados por el fiscal, consta la declaración de un reanimador del Samu, Sergio Navarro Briones, quien indicó que al llegar al lugar habían tres personas reteniendo a la mujer, a quien le habían arrebatado un bate que fue entregado posteriormente a Carabineros. Esta arma quedó como evidencia dispuesta al Ministerio Público.
Todos los hechos anteriormente expuestos fueron constitutivos del delito de parricidio frustrado, a juicio del Ministerio Público y por consiguiente se pidió la prisión para la imputada.
La defensa argumentó que se trató de una situación de lesiones, mas no de parricidio. Sin embargo, el Ministerio Público relevó la condición de riesgo vital con la que llegó la víctima al hospital, además de la intervención de terceros, que presuntamente habrían salvado la vida del hombre. Además el fiscal agregó que la imputada mantenía antecedentes y condenas pretéritas por delitos similares en contra de la misma víctima, un hombre de 64 años de edad. Es decir, no era la primera vez que había golpeado a su padre y había sido detenida por lo mismo.
La magistrada Mónica Mancilla Barría finalmente acogió la petición del Ministerio Público, decretando el ingreso a la cárcel de la mujer. Se estableció un plazo de investigación de 60 días para la presente causa.
La Prensa Austral
