Con el objetivo de promover la participación inclusiva y el desarrollo de habilidades, se realizó en Puerto Natales la cuarta versión del Concurso de Cocina Inclusiva, «La Diferencia Nos Enriquece.» Este evento fue organizado por terapeutas ocupacionales de diversos establecimientos educativos de la comuna, quienes, a través del Programa de Integración Escolar, buscan abrir espacios de crecimiento para estudiantes con necesidades especiales.
Gloria Loncon, terapeuta ocupacional y parte del equipo organizador, destacó la relevancia de esta actividad para los estudiantes que forman parte del programa. «Este concurso de cocina lo organizamos para que los niños tengan la oportunidad de participar en una actividad donde puedan mostrar sus talentos y el trabajo en equipo que realizan con sus educadoras,» explicó Loncon.
La jornada reunió a nueve grupos provenientes de distintos establecimientos: la Escuela Bernardo O’Higgins, la Escuela Juan Ladrillero, el Liceo Gabriela Mistral y el Liceo Politécnico. Cada grupo preparó un plato especial, mostrando tanto sus habilidades culinarias como su dedicación.
Para los estudiantes, la experiencia fue enriquecedora, ya que les permitió adquirir nuevas habilidades y superar desafíos personales. Uno de los participantes, que presentó unos ñoquis con salsa de hierbabuena, compartió su experiencia: «Yo antes no sabía cocinar, pero llevo un año en el taller, y he aprendido a amasar, batir y hasta encender la estufa. Cada día aprendo algo nuevo,» comentó con entusiasmo.
Por su parte, madres y apoderadas expresaron su satisfacción al ver los avances y la autonomía de sus hijos. Una madre señaló que estos espacios fomentan la autoestima y la confianza en sus hijos: «Les ayuda mucho porque valoran lo que ellos quieren hacer en la vida. Como madres, a veces tememos que se puedan quemar o lastimar, pero en el colegio, los profesores los incentivan y enseñan a ser más activos.»
«La Diferencia Nos Enriquece» se ha convertido en una actividad clave para fortalecer la integración escolar en Puerto Natales. A través de este concurso, los estudiantes no solo demuestran sus habilidades culinarias, sino que también desarrollan una mayor autonomía y confianza en sus capacidades. El trabajo en equipo, la paciencia y el esfuerzo compartido se reflejan en cada plato preparado, reafirmando el valor de la inclusión en la educación y el impacto positivo en la vida de estos estudiantes y sus familias.