La Unión Europea (UE) expresó su profunda preocupación por la situación en Venezuela tras las elecciones presidenciales del 28 de julio, y aseguró a través de un comunicado que el régimen no cumplió con los estándares internacionales de integridad electoral.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, a pesar de su compromiso, no ha publicado las actas de votación de los colegios electorales. La UE declaró que “sin pruebas que las respalden, los resultados publicados el 2 de agosto por el CNE no pueden reconocerse”. Además, señaló que “cualquier intento de retrasar la publicación completa de las actas de votación sólo arrojará más dudas sobre la credibilidad de los resultados publicados oficialmente”.
Actas publicadas por la oposición y revisadas por organizaciones independientes sugieren que Edmundo González Urrutia sería el ganador por una mayoría significativa. Ante esto, la UE pidió una verificación independiente de los registros electorales, indicando que debería ser realizada “si es posible por una entidad con reputación internacional”.
En este contexto, la UE subrayó la importancia de mantener las manifestaciones y protestas de manera pacífica. Hizo un llamado a la calma y moderación, instando a las autoridades y fuerzas de seguridad venezolanas a “respetar plenamente los derechos humanos, incluida la libertad de expresión y de reunión”.
A su vez, el bloque manifestó su preocupación por el aumento de detenciones arbitrarias y el acoso continuo a la oposición. Exigió el fin de estas prácticas y la liberación de todos los presos políticos, afirmando que “la Unión Europea está seriamente preocupada por el creciente número de detenciones arbitrarias y el continuo acoso a la oposición”. Además, valoró los esfuerzos de socios regionales para promover el diálogo y una solución negociada a la crisis.
El sábado, siete países de la Unión Europea ya habían pedido a las autoridades chavistas que publiquen las actas de votación “con el fin de garantizar la plena transparencia e integridad del proceso electoral”.
En esta iniciativa, promovida por Italia y Francia, expresaron la “profunda preocupación por la situación en Venezuela tras las elecciones presidenciales del pasado domingo 28 de julio”.
El texto fue firmado por España, Italia, Francia, Alemania, Países Bajos, Polonia y Portugal.
Infobae