El Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas condenó a la pena de presidio perpetuo calificado, en calidad de autor del delito consumado de femicidio íntimo, perpetrado en mayo del año pasado, en la capital de Magallanes.
En fallo unánime, el tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable que, en horas de la tarde del jueves 11 de mayo de 2023, la víctima, Raquel Díaz, salió de su domicilio a bordo de su vehículo particular en compañía de su pareja, el condenado Carlos Muñoz, en dirección a un inmueble ubicado en el sector de Agua Fresca de Punta Arenas.
En dicho contexto, en horas de la madrugada del día siguiente, y aprovechando la relación de confianza, el condenado ejecutó actos de violencia de género en contra la víctima, a quien atacó con un elemento contundente y otro cortopunzante, propinándole múltiples golpes y estocadas, que le provocaron la muerte por un traumatismo encefálico grave y anemia aguda.
Tras el ataque, Muñoz introdujo el cuerpo de la víctima en dos sacos de polipropileno, los amarró, introdujo en el vehículo y lo trasladó hasta el sector de la Reserva Magallanes de la ciudad, donde lo arrojó a una quebrada. El cuerpo de la víctima cayó dentro de un canal, procediendo el condenado a cubrirlo con frazadas, ramas y un refrigerador. Esto provocó el retraso se su hallazgo hasta el 15 de julio en dicho lugar.
El tribunal aplicó además a Muñoz las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para ejercer cargos y oficios públicos, profesiones titulares y derechos políticos, más la sujeción a la vigilancia de la autoridad por el máximo que establece el Código Penal y al pago de las costas del proceso.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.