Frente al descontento exteriorizado por sectores de la pesca artesanal por la manera en que han sido elaborados los planes de manejo de las áreas protegidas, en la tarde de ayer se reunieron con el gobernador regional, Jorge Flies. El tenor fue hacerle saber de las actuales vías por las que buscan anular el instrumento de Conaf, como también conocer la postura de la primera autoridad regional al respecto.
En la reunión se abordaron diversas temáticas, fuera de la principal inquietud ya señalada: los posibles problemas que podrían surgir con las plantas desalinizadoras y el hidrógeno verde; incongruencias en las bases de datos para la postulación de los fondos de Indespa; sede social en Barranco Amarillo; zonificación del borde costero.
Los acuerdos del gobierno regional fueron identificar el terreno para la sede de Barranco Amarillo, una reunión de hidrógeno verde para informar sobre los proyectos, acompañar a la reunión de pescadores con el delegado presidencial fijada para el 31 de mayo con un abogado, invitación a reunión con director de Conaf.
En esta cita también participó la Comunidad Kawésqar Kskial, que junto con los pescadores salieron “sumamente tranquilos porque el gobernador está en la misma línea que estamos intentando en esta lucha con los pescadores artesanales”, sostuvo su representante Lucía Uribe Caro. “Se vienen serias reuniones donde deberíamos tener una respuesta ya para que esto de verdad se pare”, agregó.
FUENTE: LA PRENSA AUSTRAL.
