En nuestra edición del sábado 26 de octubre dimos cuenta de la detención de dos sujetos, un ciudadano chileno y otro argentino, sindicados como autores de un millonario contrabando de cigarrillos argentinos desbaratado el día viernes en la ruta internacional de Tierra del Fuego, por parte de carabineros de la Tenencia (F) Cerro Sombrero.
Al fiscalizar un vehículo con patente chilena, los policías detectaron al interior bolsas de basuras negras conteniendo en su interior 7.250 cajetillas de cigarrillos de distintas marcas, principalmente Red Point. El avalúo de la mercancía suma unos 21 millones de pesos.
Los cigarrillos fueron introducidos en un station wagon marca Mazda. Se suma a esta mercadería ilegal algunas herramientas para el corte de alambres, visores de observación nocturna, walkie-talkies y celulares, mantenidos en el mismo móvil.
Este sábado, en el Juzgado de Garantía de Porvenir, comparecieron en calidad de detenidos, los imputados Mario Antonio Sepúlveda Barría, domiciliado en Punta Arenas, y Emanuel Gastón Quiroz, ciudadano argentino, ambos formalizados como autores de contrabando, en lo que se refiere a la Ordenanza de Aduanas en su artículo 168, Ley 20.780 (incurrirá en el delito de contrabando el que introduzca al territorio nacional, o extraiga de él, mercancías cuya importación o exportación, respectivamente, se encuentren prohibidas).
En la audiencia judicial dirigida por la jueza Paula Stange, y donde tomaron parte la fiscal Carla Uribe Leiva, y el defensor penal Paulo González, el imputado Mario Antonio Sepúlveda Barría, quedó sujeto a la medida cautelar de arresto domiciliario nocturno, entre las 22 horas de cada día y hasta las 6 horas del día siguiente, cuyo control deberá realizar Carabineros de Chile en su domicilio de calle Capitán Juan Guillermos, en Punta Arenas. También quedó con prohibición de salir de la región.
En cuanto a Emanuel Gastón Quiroz, se ordenó su ingreso a la cárcel de la ciudad de Porvenir, en cumplimiento de la medida de prisión preventiva impuesta.
En todo caso, la jueza Stange fijó respecto del ciudadano argentino, una caución de 5 millones de pesos para recobrar su libertad desde la cárcel. Una vez pagada la fianza, se alzará la prisión y se le impondrá el arresto domiciliario nocturno y el arraigo regional, debiendo informar el domicilio donde cumplirá el arresto para el respectivo control de Carabineros.
Los 5 millones de pesos fijados como caución equivaldría a lo que eventualmente el fisco y Aduanas podrían aceptar como acuerdo reparatorio.
