Como “alarmante y riesgosa”, calificó ayer el candidato a alcalde de Punta Arenas y militante socialista, Christian Gallardo, la situación en el Centro de Salud Mental Comunitaria Cosam Miraflores.
Según expresó: “La situación en el complejo de salud Miraflores es alarmante y pone en grave riesgo la salud de los trabajadores, trabajadoras y pacientes. La dignidad en la atención, tanto para los funcionarios como para los usuarios, está siendo completamente ignorada. Esta situación es inaceptable y exige una solución inmediata. Se sigue abusando de la vocación de los funcionarios y funcionarias, y no dudo que, gracias a su dedicación, este complejo siga funcionando. La salud mental ha dejado de ser solo un tema de conversación para convertirse en una prioridad que exige acciones concretas y significativas en beneficio de la ciudadanía. Su importancia y relevancia no pueden ser subestimadas”.
Problemas
Según explicó, actualmente, se están enfrentando problemas significativos en el complejo.
“La calefacción es inadecuada, hay sobrecargas eléctricas que causan cortes de energía constantes, y el alcantarillado está excedido en su capacidad. Además, los accesos peatonales son escasos, los accesos vehiculares están en mal estado, y la iluminación exterior es insuficiente o nula en varios sectores. Estas dificultades se agravan, especialmente durante las estaciones del año con temperaturas bajas y poca luz natural. A esto se suman los espacios reacondicionados que no cuentan con lo mínimo necesario para brindar una atención digna”.
Agregó que “estas demandas han persistido durante muchos años, con acuerdos, promesas y compromisos que no se han cumplido. El personal ha tenido que adaptarse continuamente, apelando a su compromiso y voluntad para cumplir con sus labores.
Sin embargo, se considera que se ha llegado a un límite en el colapso estructural. Es hora de abordar estas problemáticas y dejar de ser el eslabón débil en el sistema de salud.
Gallardo expresó: “Para abordar esta crisis, es fundamental implementar un plan de acción integral que busque mejorar la calidad de trabajo y las condiciones en las que opera el complejo. En primer lugar, es urgente realizar una revisión exhaustiva de las calderas, mantención y del circuito eléctrico del complejo, garantizando la seguridad y eficiencia en el suministro de energía”.
“Además, es imperativo reforzar el personal. Hoy existen cerca de 105 funcionarios, esto demuestra la falta de recursos humanos para dar la atención necesaria. El modelo de gestión comunitaria donde los lineamientos técnicos del Minsal establecen que cada Cosam debería atender a 750 personas; sin embargo, actualmente se están atendiendo a 3.500 personas, lo cual es insostenible. Esta sobrecarga no solo afecta la calidad del servicio, sino también la salud y el bienestar de los trabajadores”.