Bloque Manzano, la gran apuesta de Enap para reforzar el suministro de gas para Magallanes

Uno de los proyectos que lleva Enap Magallanes, enmarcado en su plan de inversiones hasta el 2027, es el proyecto del bloque Manzano. Se trata de una iniciativa prospectiva de 1.682 km2, ubicada en las proximidades del complejo petroquímico de Cabo Negro. Su primera fase se iniciará con la perforación del primer pozo exploratorio denominado “Hemmer-A”, el cual está programado para octubre del presente año.

El principal propósito de esta primera perforación es la evaluación y reconocimiento de la Formación San Jorge, la cual se encuentra a profundidades comprendidas entre los 3.550 y 3.750 metros bajo el nivel del mar. En base a investigaciones preliminares, se presume que esta formación alberga un reservorio de hidrocarburos confinados. De este modo, se anticipa que este reservorio posea un mayor espesor al del yacimiento Cahuil, ubicado en el Bloque Dorado-Riquelme, bajo condiciones de presión y temperatura superiores a este último yacimiento mencionado.

“Vamos a invertir 806 millones de dólares de aquí a 2027. Si bien gran parte de los recursos van dirigidos a los bloques ya productivos, como son Arenal, en Tierra del Fuego, y Dorado-Riquelme, en continente; nuestro compromiso con Magallanes va más allá y por eso estamos desarrollando este pozo exploratorio en un bloque nuevo más cerca de Punta Arenas, el cual -esperamos- tenga los resultados que proyectamos. No obstante, es importante señalar que al ser un pozo exploratorio siempre conlleva riesgos geológicos y operacionales que pueden incidir en el resultado esperado”, explicó Rodrigo Bustamante, gerente de Enap Magallanes. Según dijo, el gas natural está asegurado por los próximos 20 años, cifra que se va actualizando año a año gracias al trabajo de la estatal y la incorporación de reservas.

 Respecto del bloque Manzano y el pozo Hemmer, Bustamente explicó que, una vez completada la perforación del pozo, se llevarán a cabo actividades de fracturamiento hidráulico, actualmente en proceso de evaluación ambiental. Posteriormente, se realizará una prueba de producción del pozo, que, según se estima, durará 30 días. En caso de obtener resultados exitosos en esta etapa, se procederá a la construcción de instalaciones de superficie y gasoducto asociado.

FUENTE: LA PRENSA AUSTRAL.

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