– Algunos alimentos ya han subido y el valor de los alquileres podría sufrir un alza de hasta 145% en el mes de enero.
Han pasado 3 semanas desde que Javier Milei llegó a la presidencia de Argentina. Un periodo que para cualquier Mandatario recién asumido no implicaría demasiado ajetreo. Pero su gobierno -tal como lo prometió en la elección- ha buscado patear el tablero.
Y es que los primeros días del sucesor de Alberto Fernández en la Casa Rosada han estado marcados, fundamentalmente, por anuncios y medidas económicas de shock, que buscan una desregulación profunda y la reducción del gasto público.
Hasta ahora, es el ya famoso Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) o megadecreto el que se ha robado las miradas. Y el que, de hecho, más rechazo ha causado en ciertos sectores de la población, que la semana pasada salieron con cacerolas a manifestar su desacuerdo.
La famosa “motosierra” de Milei está encendida y el tiempo tendrá que decir si fue eficiente o si terminó por cortar demasiado. Por mientras, el gobierno avanza con sus anuncios y medidas y el Mandatario, en cada instancia en la que tiene la oportunidad, repite lo que dijo en su discurso tras la elección: “No hay plata”.
Devaluación y recorte
Fue el ministro de Economía argentino, Luis Caputo, quien apenas dos días después de la asunción de Milei a la presidencia dio a conocer una serie de medidas que se aplicarían con urgencia en el país.
Una de ellas, la devaluación del peso. Con ello, el tipo de cambio oficial pasó de 400 pesos argentinos por dólar a 820. Es decir, la moneda perdió un poco más del 50% de su valor.
La consecuencia inmediata de la devaluación fue el alza de algunos precios, como el del aceite, el harina, el arroz, los fideos y los lácteos, entre varios otros.
Entre los objetivos de esta medida, se encuentra el generar incentivos para que los sectores productivos aumenten la inversión.
Otro de los anuncios fue que el Estado no licitaría más obra pública nueva y que se cancelarían las licitaciones aprobadas cuyo desarrollo no haya comenzado.
A raíz de esto, algunos gobernadores han manifestado estar bajo una total “incertidumbre” por el futuro de cómo avanzará la medida en las provincias que tienen a su cargo.
Reducción a subsidios
Uno de los ejes que ha generado controversia durante los primeros días del gobierno de Milei ha sido el relativo a la reducción de algunos subsidios. En particular, a dos que parecen fundamentales: el de energía y transporte. Y es que muchos criticaban que los precios de ambos bienes eran “artificialmente bajos”.
El hecho concreto es que el fin al subsidio comenzaría a partir del 1 de enero. Y varios, como los transportistas, han advertido lo que podría ocurrir.
La Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta), sin ir más lejos, explicó a Infobae que si hoy el boleto es de $40 en promedio, en enero puede hasta llegar a ser de $1.000.
Las empresas de transporte perciben en la actualidad un subsidio que equivale al 90% del precio del boleto. El gobierno de Milei, con su medida, según ha trascendido, lo disminuiría a 60%.
Las polémicas
privatizaciones
Otra de las medidas que Milei venía anunciando desde hace meses era la relativa a la privatización de las empresas estatales.
Esta propuesta pretende materializarse a través de la Ley Omnibus, que el Mandatario trasandino envió esta semana al congreso, junto a otro paquete de medidas.
En principio, se constató que serían un total de 41 las firmas y organismos que serían privatizadas. Entre ellas, destacan YPF, Aerolíneas Argentinas, Banco de la Nación Argentina, Energía Argentina SA, Operadora Ferroviaria, Radio y Televisión Argentina, y Corredores Viales, entre otras.
Sin embargo, más tarde, el Ejecutivo salió a aclarar: “que las empresas estén sujetas a privatización no implica que se vayan a privatizar. Hay empresas que deben sanearse, pero serían imposibles de privatizar”.
En relación a qué ocurriría con los trabajadores de las compañías en cuestión, el portavoz de la Casa Rosada pidió que “estén tranquilos”.
“Si reviste esencialidad no veo por qué (los empleados) deban perder su puesto de trabajo”, señaló también.
Derogación de
ley de Alquileres
y el Megadecreto
Hace algunos días Milei presentó un megadecreto de 300 iniciativas con el objetivo desregular los mercados, incentivar la competencia, simplificar la relación entre los privados y el Estado, y suprimir la discrecionalidad.
En ese contexto, hubo una medida que se llevó varias miradas. La derogación de la ley de alquileres. Según constató La Nación, con la medida, algunos inquilinos, dependiendo de la situación, podrían ver ajustes en el monto de su alquiler el próximo mes con un incremento del 137,5% en términos interanuales.
Así, destaca el medio citado, esto significa que el alquiler de un departamento que era de $150.000 hasta diciembre, experimentará un aumento que lo llevará a $356.250 desde enero 2024 hasta el 2025.
Otros cambios del megadecreto que echó a andar el gobierno tienen relación con desregulaciones en materia laboral, de los servicios de internet y, también, de servicios turísticos.
Despido de más de
7 mil trabajadores
El ajuste fiscal de Milei siempre implicó despidos. Y muchos de ellos se concretaron durante los últimos días. Es que el gobierno trasandino dejará sin empleo a más de 7 mil empleados estatales, con el objetivo de abaratar costos.
El decreto establece que las contrataciones de personal en el sector público, que hayan iniciado a partir del 1 de enero de 2023, no serán renovadas a partir del año 2024.
El anuncio movilizó a distintas organizaciones sindicales, que ya anunciaron protestas para los próximos días.
Emol
