El estatus que adquirió por ser campeona del mundo de boxeo no cambió para nada a Daniela “La Leona” Asenjo, que sigue siendo esa joven entusiasta, cercana y alegre, que el sábado accedió a todas las fotografías y firmas de sus fans magallánicos, en la velada que se realizó en el Liceo San José, y que la tuvo como invitada estelar para dar mayor realce al encuentro deportivo. Llegó el miércoles y entregó toda su experiencia y testimonio a jóvenes de diversos clubes, y también aprovechó de reencontrarse con amistades y recorrer la ciudad.
Una relación de años, porque como apuntó a modo de introducción, su primera visita a Punta Arenas fue en un ámbito completamente diferente. “Yo era violinista y vine cuando era muy chiquitita, a un concurso estudiantil, pero hace cinco años tengo una relación con el club Patagonia Evolution, y así tenemos un lazo más directo”. De hecho, su primera actividad fue compartir con los deportistas de este club y además, con la escuela de kick boxing Kraken “y una visita al hospital a un chico del club que está enfermo”.
Este recorrido, sumado a la velada del sábado, le permitió valorar la calidad de los exponentes locales. “Son muy disciplinados, muchas veces no se dan todas las condiciones para que puedan entrenar de la mejor forma. Muchos son trabajadores, padres de familia, pero eso habla de las ganas y lo que entrega el deporte: superación, esfuerzo, disciplina y espero que las autoridades sigan apoyando a estos muchachos, que no sea algo esporádico, porque el deporte saca lo mejor de las personas y los aleja de todo lo malo. Cuesta siempre, no hay una política pública que realmente tenga los lineamientos de apoyo a lo largo del tiempo. Creo que vamos en camino y las autoridades entienden más que el deporte y la cultura son fundamentales. Se necesitan referentes para tener una sociedad más tranquila y saludable”.
Invitaciones ahora tiene por todo el país, dada su condición de campeona mundial, lo que Asenjo ha aprovechado para “incentivar el deporte, el boxeo, sobre todo en las regiones más australes del país. Que los municipios y gobiernos regionales vean que hay trabajo, que es lo que vimos en esta velada, en que hay harto potencial y talentos”, manifestó la campeona.
En esa línea, entregó la visión que le da su propia experiencia como deportista en un país donde los talentos tienen que forjarse por esfuerzo propio más que por políticas de Estado. Sobre todo en una disciplina como el box y más aún, en el caso de las mujeres. “Ya llevo 13 años boxeando, diez como profesional y ha sido un camino largo. El boxeo igual ha ido evolucionando y cada vez somos más las mujeres que lo practicamos, hay tremendas exponentes a nivel nacional, profesional y amateur, así que contenta con esta evolución, que la gente ya no vea como algo extraño que haya boxeadoras, está más normalizado. Tuve que luchar contra los prejuicios de ser mujer en un deporte mayoritariamente practicado por hombres. Lo viví, pero afortunadamente hemos demostrado con trabajo que somos deportistas hombres y mujeres, nos dedicamos de la misma forma”.
Advirtió especialmente a las niñas y adolescentes que aunque ahora su carrera está llena de éxitos, debió sortear muchas dificultades al inicio. “Tuvimos que comprobar con logros deportivos que realmente éramos buenas, y que estábamos haciendo un trabajo serio. Lo que más trato de incentivar a las niñas es que luchen, sueñen, trabajen, que sean disciplinadas y bueno, las mujeres siempre tenemos que demostrar un poquito más que somos buenas en lo que sea, no solamente en el deporte”.
El boxeo en sí mismo, carga con su propio estigma, aunque lejos de aquellos años en que prácticamente se quería prohibir su práctica. “La Leona” ha sido testigo de ello y también ha contribuido con su disciplina, a cambiar las visiones negativas en la sociedad. “Es un deporte de riesgo, en que hay que ser responsable. Nadie puede negar que los golpes en la cabeza producen daño, pero lo que hacemos es tratar de reducir ese daño con entrenamiento. Los profesionales sabemos a lo que nos subimos cada vez que entramos a un ring, anualmente tenemos que hacernos una serie de exámenes para demostrar que realmente estamos en condiciones. Un Tac, un electrocardiograma, sesiones con oftalmólogo, otorrino, para ver que estamos en óptimas condiciones. Son exámenes que nos exige la Federación de Boxeo y la Comisión de Boxeo Profesional. Creo que estos estigmas sobre lo que produce el boxeo han ido bajando, porque cada vez se profesionaliza más. Siempre digo que tenemos que ser responsables con lo que hacemos, es un deporte de riesgo, así como el automovilismo, el ciclismo, por ejemplo”.
Posible defensa
en Punta Arenas
En diciembre “La Leona” Asenjo hizo su primera defensa del título mundial, en su natal Valdivia, donde salió victoriosa ante la retadora peruana Linda Lecca “La Princesa Inca”, lo que anticipa un 2023 con mucha actividad. “Estamos con miras a una pelea comercial, quizás en abril o mayo, y estamos en conversaciones con algunos municipios, como Valdivia o incluso aquí mismo, en Punta Arenas, para hacer una nueva defensa dentro de seis, siete meses más, y la verdad, me encantaría. Ya peleé aquí, disputé el título latino en 2019 y me sentí como en casa, muy apoyada. Aquí hay muy buenos exponentes, la idea es potenciarlos y traer el título aquí le va a dar mayor realce a los deportistas que están en Punta Arenas, así que ojalá se pueda concretar”, proyectó la boxeadora, que en su paso por la ciudad se reunió con el alcalde Claudio Radonich para ir analizando esta posibilidad.
En todo caso, más allá de los títulos, el principal legado que Daniela “La Leona” Asenjo quiere dejar es “que se abran puertas a las nuevas generaciones de deportistas, tanto profesional como amateur, pero que tengan las condiciones. Una cultura deportiva, que nos falta muchísimo en el país todavía; me ha tocado ir a países como Argentina o México que si bien tienen un poco más de historia, hay una cultura deportiva notoria, y eso queremos plasmar en el país”, finalizó.