“No basta sólo con mostrarlo, es necesario escanearlo o leerlo pues así identificamos a las personas que están inhabilitadas por falta de vacunas o porque deben cumplir cuarentena”, señaló ayer el seremi Eduardo Castillo, en una actividad de refuerzo en lo que respecta la exigencia del Pase de Movilidad para ingreso a restoranes, bares, gimnasios o fuentes de soda. Dicha jornada se realizó en el Café Antakarana de Punta Arenas, con la finalidad de prevenir contagios dentro de estos locales públicos y enmarcado en las acciones preventivas que la autoridad sanitaria dispuso para las fiestas de fin de año.
Castillo indicó que se ha detectado que algunas veces los establecimientos sólo preguntan si se tiene el Pase de Movilidad, pero no solicitan mostrarlo. O si lo hacen, no escanean el código QR, con lo que no se cumple con la función que tiene este pase. “Vamos a reforzar las fiscalizaciones, tanto a las personas que tengan su Pase de Movilidad y al establecimiento que tiene que exigirlo. En caso de incumplimiento el sumario será para el local como para el cliente”, enfatizó.
Castillo añadió que “lamentablemente, en una fiscalización a locales nocturnos, a los tres que se fiscalizó, se encontró a personas que no tenían su Pase de Movilidad”, señaló.
“Nuestra proyección es que a contar del 1 de enero unas 23 mil personas quedarán con su Pase de Movilidad bloqueado”, remarcó.
En tanto Adriana Vera, dueña del Café Antakarana expresó: “Este local está orientado al adulto mayor, es un lugar tranquilo y justamente los adultos mayores son muy responsables, el que ingresa tiene esquema completo y presentan su Pase de Movilidad. Nosotros estuvimos mucho tiempo cerrado y desde enero hasta ahora hemos podido funcionar. Todos debemos ser responsables y cumplir con las medidas preventivas”.
